lunes, 15 de marzo de 2010

No seáis buenos.

No demasiado, quiero decir.

El sábado por la noche fue divertido. Noche con algunos del equipo y otros de la uni; kimera, dardos y chupitos.
Acabé volviendo a casa caminando, haciendo eses, con Vila. Cada cinco pasos chocábamos hombro con hombro.
Una nebulosa llenaba mi frente, y un sentido de culpabilidad crecía en mi interior por haber vuelto a excederme. Ya tenía remordimientos, previendo el despertar doloroso que me esperaba.

Al meter la llave de la portería en el paño, oí llantos ahogados, me giré, y en el banco de delante de mi portal yacía una joven acurrucada. Lloraba intensamente.
- Te pasa algo? Puedo ayudarte?
- No, no.. da igual.
- Hombre, no creo que dé tan igual.. te parece si me siento y me lo explicas o te dejó de rallar y me voy a dormir?
- Siéntate por favor, mmm.. si no te importa claro..
Cuando me acercaba a ella pensaba que le habría pasado algo suave como que había perdido algo, que necesitaba 5 euris para nosequé, que necesitaba llamar al novio.. no sé. Viendo como lloraba se notaba a leguas que era algo más.
Pero yo no estaba en mis mejores facultades..
Todo acabó en una hora de terapia psicológica, con una chica a la que todo le había salido mal en la vida. Hasta su familia. No entraré en detalles por respeto.
(Como 800000 personas entran aquí cada día..)

Me pidió, casi a súplicas, que la agregase al facebook. Me dijo también que quería conocer a mi novia, y que, si queríamos, ella agradecería nuestra ayuda para que saliera del agujero.
Llegué a casa y agregué a todas las personas con un nombre parecido al que me dijo. No he tenido respuesta.
Y soy tan subnormal que me preocupo, porqué quizás su novio hijo de puta le ha pegado una paliza brutal. Claro que también es posible que se avergüence de haberme contado su historia y no tenga valor de hacer click. Porqué no, quizás me pegó la trola de su vida, pero: Para qué?

En definitiva, que sigo preocupado. Y eso es asombroso.
Ah, si aún no duermo es por el café, no por nervios.

sábado, 6 de marzo de 2010

auf achsen








Cuán complicado es cuando te reencuentras con gente que hace más de un año que no ves.
Gente con la que habías compartido experiencias formidables, pero que la distancia ha resultado ser un muro infranqueable.

Tiras de tópicos y recuerdos y luego qué?
Luego todo tiene un punto entre forzado y penoso. Por todas las partes.
Te vas un poco avergonzado, por no saber manejar estas situaciones, y lo único que deseas es que el siguiente reencuentro sea lo suficientemente pronto para que no se repitan las situaciones abrumadoras, pero lo suficientemente tarde para tener cosas nuevas que explicar.

Como cruzar un lago helado. Lo suficientemente pronto para que no esté helado o lo suficientemente tarde para que esté helado del todo. No tiene nada que ver pero yo me quedado más ancho que jj.

La semana que viene, creo, me dicen que pasa con mi vida a partir de septiembre. Qué manera más fría de jugar con la gente. Un pdf en internet y a cascarla. Estoy muy nervioso. Casi tanto como en el torno de entrada al olímpico de Roma, que fue mi segunda situación más nerviosa de mi vida.

Levantarse un sábado a las 8:30 de la mañana es un palo de cojones, pero cuándo llegas a casa con los dos puntos en la saca te sientes el mejor del mundo. Si mi madre estuviese aquí me iría a comprar un croissant de chocolate y me haría un zumo de naranja. Yo celebraría la victoria, ella no. Ella celebraría tenerme un sábado por la mañana. Supongo que dentro de 20 o 30 años lo comprenderé.
Pero como no está por culpa de tener una familia inestable a 300 km, pues no me queda otra que enfundarme la sudadera de dormir y estirarme un rato en la cama esperando a que pase algo. Una llamada al móvil, un timbrazo, un meteorito estampado en el estudio... lo de cada día.

Mañana tengo uno de los mejores eventos del año, la calço-mong, y el agua no nos la joderá. Espero acordarme de coger la cámara para que veáis el ambiente, y de paso mis manos negras y mi geto lleno de salsa de calçots, no confunfir con romescu.